El fileteado sigue cumpliendo su función ornamental como en sus orígenes, y este nuevo diseño que realicé para Tupperware es algo más clásico que el anterior. Por eso el original lo pinté con esmalte sintético sobre papel, tal como se pintaban los vehículos a la manera tradicional. Lo que cambia actualmente es el tratamiento que le doy a ese diseño pintado, que es precisamente la adaptación al formato digital para su reproducción según las necesidades del producto. En este caso, las limitaciones en la impresión de los colores fueron mínimas y la calidad del contenedor es excelente, ya que la imagen parece inalterable con el uso.