Quiero compartir aquí algunas consideraciones sobre el fileteado porteño aplicado al diseño. Son más bien algunas nociones caseras, ya que no tengo demasiados conocimientos como diseñador, partiendo de tres puntos principales.
1) el conocimiento del Fileteado, 2) la gestión de un trabajo y 3) la forma de diseñar
En cuanto al primer punto, a la hora de realizar un diseño fileteado para su posterior uso lo principal es conocer muy bien dos aspectos de esta disciplina, que son manejar bien los elementos que componen el repertorio y los posibles significados que puede transmitir en el trabajo a realizar. Todos los elementos típicos como cintas, flores, hojas de acanto, motivos zoomórficos, elementos de relleno (perlas, óvalos y diamantes) se pueden componer o armar de manera que acentúen más un significado que requiere el diseño. Se puede jugar articulando dialécticamente formas “blandas”/“duras”, cerradas/abiertas, pesadas/ligeras, barroco/minimalista por dar algunos ejemplos. Tambien como se pueden combinar con elementos externos tales como logotipos, textos y tipografías.
Las ideas principales que transmite el fileteado se relacionan con su carácter tradicional, su factura artesanal y fuerte identidad.
Lo tradicional, esta vinculado a las costumbres de un pueblo y sus antepasados. Es la raíz que tiene el fileteado como pintura ornamental que se inicio como decoración de vehículos. Lo artesanal, se percibe en su estética realizada manualmente y no por medios digitales o procesos industriales. Como un producto artístico, el fileteado tiene un sello de identidad que remite a Buenos Aires en particular y a la Argentina por extensión.

El segundo punto, que es la gestión de un diseño se debe a que estos vienen realizados en su mayoría por encargos de clientes que quieren representar productos o marcas con el fileteado. A veces es normal que el cliente no sepa que es lo que quiere, porque no conoce a fondo el fileteado, ni sus propiedades y este es un obstáculo que a veces lleva a desistir de ciertos encargos. Es fundamental entonces hacerle comprender al cliente cuales son los valores que transmite una imagen fileteada y a partir de allí relacionar y armonizar los elementos del fileteado y los de la marca.
El mejor modo de desarrollar el trabajo creativo de un diseño comienza con obtener la mayor cantidad de información por parte del cliente, y sobretodo tratar de sintetizarla y ordenarla para hacer una devolución que describa claramente el proyecto del diseño, Esto evita trabajar inútilmente y optimizar el tiempo, que por lo general es siempre acotado. El proceso creativo de un diseño contempla también cada uno de sus pasos, que es necesario pautar con el cliente antes de formalizar cualquier trabajo.
Realización del boceto, modificaciones requeridas en el mismo, tiempos de entrega, forma de entrega y forma de pago son algunos de los puntos a tener en cuenta.
Otro punto fundamental es convenir de manera escrita los alcances del uso que se le dará a un diseño, como si también que ese diseño no se pueda transferir ni utilizarlo para otros fines para el cual no fue creado. Esto implica una negociación minuciosa, por no decir ardua, como así también especificar cuando no se entrega el original de la obra porque lo que se esta cediendo es solo su imagen. Para terminar, no hay que olvidar registrar la obra y adjuntar una imagen firmada a la cesión de derechos, como también ajustar el contrato previo que nos presenta el cliente.

El tercer punto, la forma de diseñar, surge en base a la aplicación de los diferentes diseños que nos pueden encargar. Para ello hay que conocer el proceso de producción de lo que será el producto final, para elegir los medios con los cuales se va a realizar el diseño. El método más práctico es pintar el diseño sobre papel, para adaptarlo luego en formato digital al uso que se le dará. Si se trata de ropa, calzado, packaging, el cliente nos va a dar los planos del mismo. Para indumentaria tenemos que conocer la progresión de talles, para que no afecten la impresión final del diseño.
Para trabajos a gran escala, hay que pintar en un tamaño que nos permita conservar los detalles. En estos casos la obra original se fotografía en estudio, (cartel de gran formato para Aiwa, en 2001) para su posterior retoque y reproducción. Si se trabaja en tamaños pequeños, (packaging) el original será escaneado con la definición necesaria para poder ser impresos (envases de latas, en 2005 y Tupperware, en 2015). Las impresiones digitales requieren un mínimo de 100 dpi y el off set 300 dpi sin perder calidad. Cuando los diseños son simétricos, los originales pueden ser pintados a la mitad, y espejarse en photoshop. A veces es necesario saber vectorizar los diseños y separarlos en capas, para darle al cliente diferentes opciones de fondos.
Otro método es trabajar con diferentes módulos, conservando por ejemplo la parte central del diseño y realizar diferentes los marcos (campaña para Turner Argentina, en 2014). Es muy importante poder manejar programas de diseño que nos permitan trabajar separar, transformar y reproducir los diferentes elementos.